Congreso internacional sobre ecumenismo finalizó con liturgia que celebró la unidad

La clausura se realizó en la sede de la ex Vicaría de la Solidaridad, después de tres días de desarrollo de esta actividad, que se constituye en la primera de estas características en efectuarse en Chile.

El Congreso Internacional: Recuperando la Historia del Ecumenismo en América Latina y el Caribe, se realizó durante tres días en la Pontificia Universidad Católica de Chile. La clausura se hizo con una liturgia ecuménica que reunió a representantes de las iglesias cristianas en Chile: Monseñor Manuel Camilo Vial (obispo de la Iglesia Católica), monseñor Sergio Abad (Arzobispo Ortodoxo Metropolitano de Chile), Rvdmo. Héctor Zavala (Obispo de la Iglesia Anglicana de Chile), la pastoral Izani Bruch (Iglesia Evangélica Luterana de Chile), Obispo Mario Martínez (Iglesia Metodista), y la pastora Juana Albornoz (Presidenta de la Iglesia Misión Apostólica).

La ceremonia se efectuó en la sede de la ex Vicaría de la Solidaridad, entidad que se originó con la creación del Comité de Cooperación para la Paz en Chile, un organismo de carácter ecuménico que prestaba asistencia legal y social a las víctimas de violaciones a los derechos humanos.

Luego de las lecturas de la liturgia, la reflexión estuvo a cargo de monseñor Manuel Camilo Vial, obispo emérito de la Iglesia Católica y de la pastora de la Iglesia Evangélica Luterana de Chile, Izani Bruch.

Durante su intervención, monseñor Vial destacó el hecho de celebrar esta liturgia en la sede de la ex Vicaría de la Solidaridad, que “posee una historia tan fecunda”. “Cristianos luteranos, anglicanos, metodistas pentecostales, ortodoxos, bautistas, y hermanos de la sinagoga judía y católicos, concurrieron en el año 1973 a la fundación del Comité Pro Paz que, como bien sabemos, fue una iniciativa ecuménica desde sus inicios, que muestra la fuerza de la unidad en la fe para el bien de la sociedad”, sostuvo.

Además, agregó que esa experiencia de comunión en la fe, que nace del bautismo, hizo de este grupo un emblema de solidaridad y un ejemplo de la fuerza moral de la unidad de la fe, lo que permitió que muchos creyeran, morigeraran muchos sufrimientos y también salvaran muchas vidas. “Esto debería ser siempre para nosotros un aliciente en el camino ecuménico”.

Por su parte, Izani Bruch, señaló que la búsqueda de la unidad de los cristianos en América Latina, ha sido una forma que han tenido las iglesias para sobrevivir a los duros momentos de nuestra historia, para cuidar y defender la vida y los derechos humanos.

“Ha sido un camino que nace de la profunda convicción evangélica de ser uno en oración y acción, frente a lo que amenaza la vida de la creación de Dios y lo que daña la dignidad humana. Ciertamente, en ese caminar, como han reflexionado durante el Congreso, ese caminar ecuménico, hubo muchas piedras en el camino. Resistencias y obstáculos”, explicó.

Sin embargo, sostuvo que el amor de Dios siempre es más grande. “La gracia de Dios misericordioso nos permite celebrar siempre el encuentro, el diálogo, la comunión. Nos permite ver que el ecumenismo es un regalo, es un don de Dios para nuestras iglesias”, expresó.

El Congreso internacional: Recuperando la Historia del Ecumenismo en América Latina y el Caribe, fue realizado en el marco del proyecto internacional: "Ecumenismo: Una historia de búsqueda de la unidad de los cristianos en las iglesias entre los siglos XIX y XXI", que se lleva a cabo al cumplirse en 2017, 500 años de la ruptura de la unidad entre la Iglesia Católica y la Reforma Luterana.

El Congreso internacional: Recuperando la Historia del Ecumenismo en América Latina y el Caribe, fue realizado en el marco del proyecto internacional: "Ecumenismo: Una historia de búsqueda de la unidad de los cristianos en las iglesias entre los siglos XIX y XXI", que se lleva a cabo al cumplirse en 2017, 500 años de la ruptura de la unidad entre la Iglesia Católica y la Reforma Luterana.