Te Deum 2018

La ceremonia de acción de gracias por la Patria este año se desarrolló acorde a nuestra tradición e historia republicana.  La presencia de las principales autoridades de la nación, -encabezadas por el Presidente de la República-, el Deán de la catedral y los sacerdotes, los pastores ortodoxos y evangélicos, junto  los representantes de la comunidad judía y musulmana, en conjunto con creyentes y no creyentes, fueron el marco de la oración por el bien común y el desarrollo de nuestro país. Así lo sostiene el rector Ignacio Sánchez en una carta que publica este jueves 20 de septiembre diario La Tercera.  

De  manera excepcional, -y por ausencia voluntaria del Sr Cardenal-, la homilía este año fue pronunciada por el Abad de los Benedictinos, Benito Rodríguez OSB. Según dice el rector,  en su mensaje  se pudieron distinguir tres aspectos principales.  El primero fue destacar las bendiciones que hemos recibido al habitar en nuestra Patria, lugar en donde podemos desarrollar un proyecto en común. El segundo, fue el llamado a acoger a todos quienes vienen de otros países a integrarse a nuestra nación, para construir un país más inclusivo y diverso, recibiendo un aporte que nos hará crecer como pueblo en paz y hermandad. Y el tercero, -y muy necesario-, fue reconocer que en la iglesia se han cometido delitos y pecados, los que hay que reconocer, pedir el perdón y realizar los juicios que son necesarios. Siempre cuidando a las víctimas de tanto dolor, en especial cuando han sido niños los afectados.

“Los términos de purificación y renacer desde el perdón y la confianza resonaron con firmeza en sus palabras finales”, señala el rector Sánchez. Según dice, este Te Deum fue una acción de gracias por la Patria que tenemos y también fue una oración para comprometernos en el renacer de la Iglesia.

 

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