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Foro UC conoce los avances del proceso de participación y el nuevo Centro para el Diálogo y la Paz


Ambos temas despertaron gran interés entre los asistentes, quienes recogieron el desafío y la necesidad de participar en el proceso constitucional, así como también la urgencia de diálogo en la ciudadanía.

Foro Universitario UC desde la Facultad de Arquitectura y Estudios Urbanos.- Foto Karina Fuenzalida

photo_camera El Foro Universitario UC es una iniciativa de análisis e intercambio de ideas que surgió el 2017. Hoy, luego de seis años de marcha, se ha convertido en un espacio de encuentro importante para la comunidad universitaria.- Foto Karina Fuenzalida

Con una hermosa vista a la cordillera, en el último piso del nuevo edificio de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos, en el Campus Lo Contador, se realizó la segunda sesión del año del Foro Universitario UC.

Por primera vez el salón vidriado abrió sus puertas para recibir a los integrantes del Foro, en una sesión convocada para revisar los avances y los desafíos de dos importantes temas para la institución: la actualización del proceso de participación ciudadana en el trabajo constitucional 2023, que estuvo a cargo del director del Centro de Políticas Públicas UC, Ignacio Irarrazabal; y el Centro para el Diálogo y la Paz, que abordó su director, Patricio Bernedo.

El Foro Universitario UC es una iniciativa de análisis e intercambio de ideas que surgió el 2017, con miras a debatir y reflexionar sobre temas de interés para la institución. Hoy, luego de seis años de marcha, se ha convertido en un espacio de encuentro importante para la comunidad universitaria. Sus miembros se reúnen en cuatro sesiones anuales, dos por semestre, para revisar distintos aspectos, en una actividad que propicia el vínculo entre los participantes de las diversas reparticiones y unidades académicas.

Respecto del proceso de participación ciudadana, el rector Ignacio Sánchez destacó lo que se ha trabajado  en conjunto con la U. de Chile y con el sistema universitario nacional. “En este momento estamos muy activos en visitas a regiones, participando de diálogos ciudadanos, incentivando las audiencias públicas, las iniciativas de norma y los procesos autoconvocados. En lo personal, como rector, he visitado varias regiones y la próxima semana y la siguiente también tenemos en agenda estar en universidades regionales”, comenta.

“Se abordaron temáticas muy relevantes para la universidad y abrió  una fuente de diálogo con los miembros del foro, que por una parte permite una mejor implementación de las medidas expuestas  y por otra una gran difusión de los conocimientos que entrega la universidad”- rector Ignacio Sánchez.

La autoridad universitaria se refirió también a la propuesta con la que nació el Centro para el Diálogo y la Paz y el desarrollo que ha tenido en este año y medio de funcionamiento, sus desafíos y sus alcances, que tienen que ver con los conflictos del país, con una mirada internacional, con la realidad que está viviendo Chile hoy.

“Creo que los asistentes demostraron gran interés en los  temas, valoraron ambas iniciativas y abordaron nuevas temáticas para complementar lo que ya se está realizando. En resumen, tal como en otras oportunidades, se abordaron temáticas muy relevantes para la universidad abriendo  una fuente de diálogo con los miembros del foro, que por una parte permite una mejor implementación de las iniciativas expuestas  y por otra una gran difusión de los conocimientos que entrega la universidad”, precisa el rector.

Distintas miradas para un proyecto común

Por su parte, Ignacio Irarrázaval presentó los avances y desafíos de la Secretaría de Participación Ciudadana en el proceso constitucional al 12 de junio 2023, que está a cargo de la Universidad Católica y la U. de Chile a través de la implementación de cuatro mecanismos: audiencias públicas, iniciativa popular de norma, diálogos ciudadanos (convocados y autoconvocados) y consultas ciudadanas.

La misión de la secretaría es ser el vínculo con las distintas instituciones y organizaciones que son claves para el éxito del proceso; como también, apoyar a los secretarios ejecutivos -Ignacio Irarrázaval de la UC y Claudio Troncoso de la U. de Chile- en la coordinación con universidades, organizaciones de la sociedad civil y otros grupos de interés.

“Hemos tenido una buena acogida colaborativa de parte de todo el sistema universitario, que ha entendido el desafío. También hemos contado con la colaboración de más de 100 organizaciones de la sociedad civil, no solo las universidades del CRUCH, sino también las 42 universidades privadas acreditadas, los Institutos Profesionales y Centros de Formación técnica”, manifestó Irarrázaval.

También comentó que es importante que un proceso de redacción constitucional, se reconozca el valor que tiene el involucramiento y la participación de la ciudadanía para hacer más probable el éxito y mejorar su resultado. “Al involucrar a diferentes actores y permitir que se expresen diversas opiniones, se busca fortalecer la legitimidad del proceso”, precisa.

"La participación ciudadana es un espacio de encuentro entre los chilenos, que permite a los ciudadanos involucrarse en un asunto público de trascendental importancia para el país. Sólo a través de integrar una diversidad de miradas podremos llegar a un proyecto común”- Ignacio Irarrázaval, Secretario Ejecutivo Participación Ciudadana.

En este sentido agrega que la participación ciudadana es un espacio de encuentro entre los chilenos, que permite a los ciudadanos involucrarse en un asunto público de trascendental importancia para el país. “Sólo a través de integrar una diversidad de miradas podremos llegar a un proyecto común”, subraya.

Respeto, pluralismo, diálogo

En la segunda parte del encuentro, el director del Centro UC para el Diálogo y la Paz hizo una extensa presentación sobre la nueva instancia.

Según Patricio Bernedo, la creación del Centro responde a los tiempos actuales en que nuestra sociedad evidencia preocupantes niveles de polarización política, descrédito de las instituciones, inseguridad y tensiones crecientes provocadas por conflictos de larga data, como ocurre en La Araucanía, un poco más recientes a propósito de los 50 años del golpe de Estado, y con niveles de violencia que alteran la convivencia e impiden la resolución de nuestros conflictos. A nivel internacional recrudecen las guerras y las crisis globales que afectan literalmente a todo el mundo. “En ese escenario, nuestro Centro surge con la firme e histórica convicción de promover el diálogo para conseguir la paz. Para ello incentivaremos el encuentro entre los que piensan diferente, entre quienes pueden estar en otras posiciones, ya sea por sus culturas ancestrales, sus historias de vida y también por los acontecimientos que les ha tocado vivir. Pensamos que el encuentro entre los diferentes es el camino para resolver los conflictos y avanzar en la anhelada cohesión social, que será la forma de lograr una convivencia nacional considerando nuestras legítimas diferencias”, sostiene.

Para ello se está generando una agenda académica interdisciplinaria que permita ir instalando en la UC y en la sociedad una cultura de paz, que impulse la formación especialmente de los y las  estudiantes como agentes para el diálogo y la paz.

“Se trata de ir forjando una manera de pensar y hacer las cosas, que nos permita ir construyendo una cultura de paz, donde se promueve el respeto mutuo, el pluralismo y el diálogo, la promoción de la justicia más allá de las dimensiones estrictamente jurídicas, como base de un ordenamiento social que impulsa la cohesión y la solidaridad en la vida en sociedad, donde el conflicto es connatural”- Patricio  Bernedo, director Centro UC para el Diálogo y la Paz.

Sin embargo, dice que no se trata de crear un país de ensueño, como algunos se imaginan, a veces con sospecha y desconfianza, cuando escuchan las palabras diálogo, paz y cultura de paz.  “No, no se trata de un ideal ingenuo, se trata de ir forjando una manera de pensar y hacer las cosas, que nos permita ir construyendo una cultura de paz, donde se promueve el respeto mutuo, el pluralismo y el diálogo, la promoción de la justicia más allá de las dimensiones estrictamente jurídicas, como base de un ordenamiento social que impulsa la cohesión y la solidaridad en la vida en sociedad, donde el conflicto es connatural”, manifiesta Bernedo.

Se trata, también, de que vayamos, todos y todas, aprendiendo a administrar, a convivir y a solucionar nuestros conflictos personales y sociales, en el entendido de que siempre tendremos conflictos, pero que debemos dialogar paciente y pacíficamente para  resolverlos con madurez y mirada de bien común.

Finalmente, ratifica que el objetivo de nuestro centro será defender la vida y fortalecer el diálogo como el método que permite llegar a la paz, para ir creando una cultura de paz, que se asocia a valores como la tolerancia, la colaboración, la solidaridad, el amor, la verdad, la justicia, la humildad, el respeto, el perdón, la serenidad y la libertad.


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