Violencia escolar: ¿Quién se hace responsable?
El sistema educativo muestra sus grietas. Las cifras de agresiones y violencia en contextos escolares van en aumento. La Superintendencia de Educación ha señalado que, en el primer trimestre de este año, se registró un incremento del 25% en las denuncias por convivencia. ¿A qué se debe? ¿Por qué se gatillan?

photo_camera La académica UC, Patricia Guerrero, comentó que una de las formas para poder enfrentar la violencia en los colegios es entregar espacios para que los estudiantes se conozcan y así crear comunidad. Foto: Dirección de Comunicaciones.
El tiroteo en el Colegio Nuevos Horizontes de San Pedro de la Paz o el asesinato de un estudiante en la plaza de Melipilla son ejemplos del aumento de la violencia escolar, situaciones que no solamente involucran a los jóvenes, sino también a profesores y apoderados.
Según el reporte trimestral de denuncias que publica la Superintendencia de Educación, en el primer trimestre de este año se registró un total de 2.501 casos, lo que representa un aumento del 14,2 % en comparación con el mismo periodo de 2024 (2.190).
Estas cifras reafirman la tendencia al alza en las denuncias, de ahí que los actores del sistema educativo pongan el foco en la prevención temprana de situaciones que alteran la convivencia.
“Los jóvenes, poco a poco, viéndonos a nosotros, han ido generando una cultura que a ellos les ha hecho mucho daño, porque los jóvenes le dan mucho más crédito a lo que ven que a lo que oyen. Este es un tema transversal que también implica reflexionar respecto de la labor que realizan los padres y también todo el ambiente del país"- arzobispo de Santiago, Fernando Chomali, Gran Canciller UC
Patricia Guerrero, académica de la Facultad de Educación UC, aseguró que la pandemia y las redes sociales han provocado que los jóvenes no establezcan relaciones entre ellos. “Los niños siempre han hecho vínculos, han hecho amigos. Es como parte de la infancia. Pero hoy eso no es tan evidente. Van al mall y no se hablan, sino que se piden los Instagram. Tienen una forma de socialización que les dificulta mucho hacer amigos. Algo que nosotros creemos que es normal en el desarrollo humano, ya no es tan normal”.
Esta preocupante realidad llevó al arzobispo de Santiago y Gran Canciller de la Universidad Católica, cardenal Fernando Chomali, a reunirse con el ministro de Educación, Nicolás Cataldo, con el fin de analizar en profundidad el tema de la violencia en contextos escolares. La reunión contó también con la presencia del rector de la Universidad Católica, Juan Carlos de la Llera.
Para el arzobispo de Santiago el diagnóstico es claro, ya que en muchos jóvenes hay un gran malestar por no sentirse amados ni respetados, por no sentirse parte de la sociedad. “Tenemos que ayudarles a encontrarle un profundo sentido a sus vidas, y creo que ese es el camino que tenemos que emprender", señaló. Y agregó: “Los jóvenes, poco a poco, viéndonos a nosotros, han ido generando una cultura que a ellos les ha hecho mucho daño, porque los jóvenes le dan mucho más crédito a lo que ven que a lo que oyen. Este es un tema transversal que también implica reflexionar respecto de la labor que realizan los padres y también todo el ambiente del país".
“Los niños siempre han hecho vínculos, han hecho amigos. Es como parte de la infancia. Pero hoy eso no es tan evidente. Van al mall y no se hablan, sino que se piden los Instagram. Tienen una forma de socialización que les dificulta mucho hacer amigos. Algo que nosotros creemos que es normal en el desarrollo humano, ya no es tan normal”- Patricia Guerrero, académica de la Facultad de Educación UC.
La académica comentó que una de las formas para poder enfrentar la violencia en los colegios es entregar espacios para que los estudiantes se conozcan y así crear comunidad. “Las escuelas tienen que intencionar ese vínculo. Hay que volver a hacer comunidad. ¿Cómo? Con espacios para el encuentro, guiados, que pueden hacerse tres veces a la semana: 10 minutos de trabajo de vínculo entre los compañeros. Hay que volver al trabajo de grupo bien diseñado. Enseñarles a los niños a trabajar en grupo es una habilidad tremendamente importante”.
Otro punto que destacó la experta es la necesidad de reducir la cobertura curricular y dar espacios reales para el trabajo socioemocional.
“Las escuelas tienen que intencionar ese vínculo. Hay que volver a hacer comunidad"- Patricia Guerrero, académica de la Facultad de Educación UC
“La UNESCO ya no dice ‘cuidemos la calidad (de la educación)’, como hacía en 2005. Hoy en día dice ‘reimaginar nuevos futuros juntos a partir de la educación’, que es un poco lo mismo que dice el canciller: reimaginar un mundo común, un mundo con amor, un mundo con cariño”, concluyó la académica.