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Ex profesor UC y destacado dramaturgo Egon Wolff fallece a los 90 años


Prolífico y reconocido dramaturgo, autor de obras como “Los invasores” y “Flores de papel”, Wolff obtuvo en 2013 el Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales de Chile.  Formó a varias generaciones como profesor de la Escuela de Teatro UC. Académicos de la universidad recuerdan su legado.

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photo_camera Archivo UC

A días de la partida de Juan Radrigán, el mundo cultural y de las artes lamenta el fellecimiento de otro dramaturgo y premio Nacional. Se trata de Egon Wolff, autor de importantes obras para el teatro chileno con su particular estilo, caracterizado por el uso de giros argumentales, y por repetir la misma escena al inicio y al final. Las obras de Wolff abordan temas sociales, de política contingente, con componentes existencialistas. 

Egon Wolff nació el 13 de abril de 1926 en Santiago y estudió Ingeniería Química en la Universidad Católica, aunque nunca ejerció. Luego estudió Teatro en la UC y posteriormente en la Universidad de Chile. En 1979 se incorporó como profesor titular de Dramaturgia en la Escuela de Teatro de la UC, cargo que ejerció hasta 1991. 

La versión original de “Los invasores”, en 1963, fue dirigida por Víctor Jara, con Tennyson Ferrada y Bélgica Castro en su elenco, tuvo una feroz polémica por el retrato del antagonismo de clases que presenta. En total, sus obras han sido montadas en una treintena de países. 

El director de la Escuela de Teatro UC,  Alexei Vergara, recuerda su legado. "Falleció nuestro querido ex profesor Egon Wolff, Premio Nacional 2013.  Don Egon perteneció a una gran generación de dramaturgos y fue maestro y formador de muchísimas otras. A los pocos días de haber ganado el Premio Nacional lo invitamos de vuelta a nuestro teatro y por iniciativa de los estudiantes homenajeamos su carrera, le agradecimos el legado que dejó en la Escuela de Teatro UC y al teatro chileno. En aquella ocasión se presentaron escenas de sus obras y fuimos testigos de la diversidad de temas y preguntas que lo acompañaron siempre sobre las estructuras sociales y el sentido de la vida. Fue tal su contribución a nuestra escuela que recibió uno de los cuatro “guarenes de oro” que se han entregado a destacados personajes que nuestra comunidad admira y quiere".

Vergara agrega que como profesor siempre lo recordaremos cono un maestro generoso y compañero cercano.  "Reciba nuestro abrazo Don Egon."

Wolff también obtuvo el Premio Nuez Martín que otorga la Facultad de Letras y la fundación del mismo nombre por su trayectoria como dramaturgo. Por lo mismo, esa unidad académica y la universidad apoyaron su candidatura al Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales que obtuvo hace tres años. 

Algunos de los títulos que conforman su obra son: Tras una puerta cerrada (2000), Encrucijada (2000), Claroscuro (1995), Cicatrices (1994), Invitación a comer (1993), Háblame de Laura (1985), La balsa de la Medusa (1984), El sobre azul (1983), Álamos en la azotea (1981), Espejismos (1978), Kindergarten (1977), Flores de papel (1970), Los invasores (1963), Niñamadre (1961), Parejas de trapo (1959), El signo de Caín (1958), Discípulos del miedo (1958) y Mansión de lechuzas (1957); entre otros.

 

Reconocimiento a su fuerza dramática

Para la académica de la Facultad de Letras, Carola Oyarzún, se trata de una gran pérdida. "Enseñé a Egon Wolff por muchos años en la facultad y mi obra preferida fue siempre Flores de papel (1971)". 

En el año 2013 cuando Wolff recibió el premio Nacional, la profesora Oyarzún señaló que Egon Wolff  “es sin lugar a dudas uno de los talentos más serios de la dramaturgia hispánica”, añadiendo que el Premio Nacional es el mayor reconocimiento "a un autor de notable fuerza dramática y escénica". 

La académica escribió a propósito del reconocimiento: "Egon Wolff explora la decadencia y estancamiento en familias empobrecidas y esclavas del status,  parejas desgastadas por la convivencia, hijos aferrados a sus padres, grupos encerrados, y figuras solitarias, dentro de historias que se sustentan en poderosas composiciones escénicas, verdaderos cuadros expresionistas. Buenos ejemplos son Los invasores (1963), La Balsa de la Medusa (1984), Háblame de Laura (1986); nos dejan un legado de personajes y escenas inolvidables por su carga emotiva y teatral".

"Los textos de Wolff recurren a diferentes tipos de amenaza y violencia social y es la burguesía el flanco de su mirada; una clase subyugada por el miedo a aquellos que provienen del  “otro lado del río”, lugar que se instala como la metáfora de las divisiones dentro de la  ciudad. Es el caso de Flores de papel (1970) obra maestra que, a partir de una situación cotidiana, avanza hacia el delirio/pesadilla comprometiendo no solo a los personajes, sino también al espacio: todo se transforma en un despliegue de objetos y formas que inundan el campo visual".

Quienes deseen acompañar a la familia pueden hacerlo en el velatorio nº 4 del Parque del Recuerdo (Calle Américo Vespucio 555, Huechuraba). A las 12:00 hrs, se despedirá con una misa y posteriormente se llevará a cabo el funeral.

Enlaces Relacionados

En esta edición de la Revista Universitaria se puede leer una completa entrevista realizada al dramaturgo.

 

INFORMACIÓN PERIODISTICA

Rafaela Merino-Bianchi, Facultad de Arte  y Carola Oyarzún L. profesora Titular, Facultad de Letras UC

 


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