
Impregnar la Universidad de las artes
Durante quince años, esta dirección a cargo de Miryam Singer, buscó instalar el arte y la cultura en el corazón de la Universidad y dar un decidido impulso a la investigación académica, primero, y luego llevar todo eso a las comunidades, de norte a sur. Iniciativas como “Artifica la UC”, concursos de investigación y creación, “Artifica tu barrio”, la Orquesta Sinfónica de Estudiantes UC, y “La flauta mágica en la escuela”, entre muchas otras, fueron el resultado de esta apasionada y perseverante labor, la que quedó plasmada en una reciente publicación.

photo_camera En total, fueron más de 800 iniciativas de investigación, creación e internacionalización, durante los quince años de la Dirección, los que fueron apoyados con más de 2 mil millones de pesos, a través de distintos concursos. (Fotografía gentileza de la Dirección de Artes y Cultura)
Miryam Singer, Premio Nacional de Artes Musicales 2020, y directora de Artes y Cultura hasta marzo pasado, habla con el mismo entusiasmo de ópera que de cambio climático. La pasión traspasa todo su ser y logra contagiarla a quien la escucha, consiguiendo cosas increíbles: repletar la plaza de San Pedro de Atacama para un concierto de música sinfónica como si se tratara de uno de rock, organizar la visita del Papa Francisco a la UC o llevar la cultura de modo online a la comunidad universitaria en plena pandemia. Pura pasión. Y perseverancia, también.
- ¿Y cómo ves la universidad en la actualidad?
La veo como un corredor de las Olimpíadas esperando que le den la partida. Para llegar a ese punto tiene que estar en un estado insuperable, pero disponible para afrontar otro desafío más complejo aún en su desarrollo. Y es como veo a la Universidad que dejó el exrector Ignacio Sánchez y que ahora recibe el rector Juan Carlos de la Llera, quien toma la posta y le dará su propia impronta.
- El rector De la Llera se ha pronunciado muy positivamente hacia las artes. ¿Cómo lo ves tú?
Conozco muy de cerca el compromiso del rector De la Llera con las artes y no puede ser más auspicioso. Desde su primer año como decano de la Escuela de Ingeniería me llamó para encargarme la celebración más importante de la Escuela: la graduación de muchos cientos de ingenieros. Él quería algo especial, algo inédito, proveniente de la alta cultura, y eligió tres escenas de ópera. ¡Imagínate! ¡Hay que pensar realmente fuera de la caja para llevarle a los ingenieros tres escenas de ópera! De allí en adelante, cada año eligió lo mejor de la tradición musical.
- Pero, rebobinemos: ¿Por qué una Dirección de Arte y Cultura en la Vicerrectoría de Investigación?
“Los orígenes son bien bonitos. Cuando el Comité de Búsqueda estaba haciendo el levantamiento para proponer la terna en 2009 -de la cual se nombraría al entonces rector Ignacio Sánchez-, había sido un verdadero clamor de la comunidad que hubiese una atención particular a las artes. En 2010, el rector Sánchez independizó la Vicerrectoría de Investigación -que en ese entonces era una vicerrectoría adjunta-, con el encargo también de que se creara una oficina dedicada a las artes”.
Así fue como el entonces vicerrector de Investigación Juan Larraín, se reunió con profesores de distintas unidades académicas del área de las artes, y les hizo la siguiente pregunta: `¿Qué puede hacer esta vicerrectoría por las Artes en la UC?’. Fue entonces cuando Miryam Singer se lanzó con sus propuestas, las que llegaron a buen puerto, ya que fue la encargada de liderar la recién creada Dirección Artes y Cultura en la UC, hace quince años atrás.

La flamante directora propuso partir por hacer un levantamiento de la situación de las artes en la UC. “O sea, fui a escuchar a todo el mundo. Me junté, diría yo, con casi el cien por ciento de los decanos, de todas las áreas. Absolutamente interesante. Después recogí los sentires de la gente del área, principalmente profesores, también me entrevisté con el sindicato…”, recuerda.
Con todo ese feedback, Miryam Singer elaboró un proyecto que, en sus palabras, “tenía dos líneas: la primera, era el fomento a la investigación y creación artística del estamento académico, para lo cual era necesario ampliar los fondos y crear concursos ad hoc; mientras que la segunda, buscaba apoyar a los emprendimientos artísticos de toda la comunidad universitaria, dando comienzo a los diversos programas Artifica.
Desde el inicio, la Dirección de Artes y Cultura (DAC) se planteó varios desafíos clave: fortalecer una política de acción afirmativa para las artes, mejorar su integración al proyecto universitario, visibilizar la naturaleza investigativa de la creación y la práctica artística, y promover su presencia en la vida universitaria.
La investigación Artística

La tarea más importante de esta nueva Dirección sería, entonces, el fomento de la investigación y creación artística, potenciando las capacidades existentes para desarrollar un cuerpo de obra que lograra un impacto definitivo en el quehacer académico artístico universitario. Con ese objetivo, la DAC brindó un decidido apoyo al cuerpo académico de las diversas unidades vinculadas a las artes. Esto significó apoyar no solamente a la Escuela de Arte, la Escuela de Teatro y el Instituto de Música de la Facultad de Artes, sino también a la Facultad de Letras, la Escuela de Arquitectura, la Escuela de Diseño, el Instituto de Estética y muy especialmente, el Campus Villarrica en su desarrollo artístico.
El acento se puso, primero, en las respectivas disciplinas por separado, y después del primer quinquenio, en los proyectos interdisciplinarios. En total, fueron más de 800 iniciativas de investigación, creación e internacionalización, durante los quince años de la Dirección, los que fueron apoyados con más de 2 mil millones de pesos, a través de distintos concursos, como el de Creación Artística; las líneas de Creación y de investigación (CCA); y los concursos InterArtes, y de Artes, tecnologías, Ciencias y Humanidades (ArTeCyH), entre otros.
“Artificando” la UC
Una de las primeras iniciativas de la Dirección de Artes y Cultura fue el Festival de las Artes Artifica la UC. La iniciativa permitió que los estudiantes, y toda la comunidad universitaria, pudiera disfrutar durante el recién creado módulo de almuerzo, de obras de teatro, música y hasta ópera. “Yo lo llamaba ‘arte al paso’. La gente pasaba, yo ponía solo 25 sillas, y las personas se quedaban de pie, ¡y se llenaba!”, recuerda la también soprano.
Generalmente eran los propios académicos y estudiantes quienes realizaban las obras, aunque también se contó con invitados especiales, como el reconocido pianista Roberto Bravo o el destacado grupo de teatro Tryo Teatro Banda. Y el escenario, aunque la mayoría de las veces fueron los patios, también fue en las Aulas Lassen en el Campus San Joaquín o el Salón de Honor de Casa Central, entre otros.
Después nació “El paseo de las artes”, un recorrido por los campus con “estaciones” donde iban apareciendo un dueto, un baile de cueca o una soprano, entre otras presentaciones breves, especialmente para las visitas internacionales o fechas especiales, como el Día del Patrimonio. Otra iniciativa fue la “Guía para las artes en la UC”, que buscaba ser una suerte de agenda cultural que reuniera toda la información de conciertos, exposiciones, obras de teatro, charlas, seminarios, encuentros, además de información sobre las revistas académicas y cursos de educación continua vinculados a las artes. En suma, se buscaba visibilizar todo el esfuerzo que realizaba la Universidad en relación a las artes y dejarlo disponible para el uso y disfrute de la comunidad universitaria.

Asimismo, se creó un curso optativo de formación general de un semestre, para todos los estudiantes interesados, en los campus San Joaquín y Casa Central. El curso integraba clases teóricas sobre artes visuales, arquitectura, ballet, cine, estética, música sinfónica, ópera, poesía y teatro, con una “experiencia viva”, llevando a los estudiantes al Teatro Municipal a escuchar ópera, música sinfónica y ver ballet, teatro, al Museo Nacional de Bellas Artes, al Cine UC, a recorrer hitos de la arquitectura chilena, entre otras visitas. Durante los 13 años que se impartió el curso, 1.900 estudiantes de pregrado participaron de esta experiencia.
En suma, de lo que se trataba, en palabras de Miryam Singer, era de “impregnar la universidad de las artes”.
Orquesta Interfacultades

Otro hito fue el apoyo a la Orquesta Interfacultades. “La orquesta se montó sola, porque fue un grupo de alumnos que se juntó a tocar y como eran muchos, de repente se dieron cuenta que no era como un cuarteto que se miran, respiran y empiezan. No, aquí necesitaban una cabeza. Y fueron a buscar a Eduardo Jahnke -profesor de la Facultad de Ingeniería y el Instituto de Música-”, recuerda Miryam.
Al comienzo, la orquesta recibió apoyo de la Facultad de Ingeniería, y de la Prorrectoría a través de la Dirección de Asuntos Estudiantiles, siendo finalmente administrada bajo la Dirección de Artes y Cultura. La orquesta está constituida por estudiantes de todas las carreras de la UC, es decir, no son músicos profesionales. A fines de 2024 la Orquesta realizó una gira por el norte que reunió a más de 1700 asistentes, en lugares como Antofagasta, San Pedro de Atacama, Iquique y Arica.
La histórica visita del Papa Francisco

La visita del Papa a Chile y a la UC, en enero de 2018, “fue uno de los más grandes desafíos que abordé durante mi período como directora de Artes y Cultura”, afirma Miryam Singer y agrega: “Recuerdo que el rector Sánchez me convocó a una reunión con las autoridades de la Universidad, donde se planteó la necesidad de contratar una empresa que se ocupara de toda la producción. Expuse todos los detalles de una producción de esa naturaleza, demostrando que era innecesario contratar a una empresa externa. En esa misma reunión, el rector decidió encargarme la producción general a mí”.
Entonces se conformó una comisión interna de la Universidad para este fin, con la participación de distintas unidades académicas y de la Dirección Superior. “Trabajé coordinando a muchísimas personas para abordar las diferentes partidas que requería esa visita. Diseñé el recorrido del Papa con el detalle de los planos de escenarios, me encargué de todos los equipos técnicos y el equipamiento, organicé la música y los músicos, coordiné todos los aspectos de seguridad y salud, coordiné los detalles de la actividad en la UC con la autoridad pública: la Intendencia, Municipio, Carabineros, Bomberos, en fin, todos los detalles de una producción que había que conocer, imaginar, prevenir, programar, administrar, gestionar y ejecutar. Por encima de todo eso, me encargué de calcular el costo del evento completo y administrar la caja. Hubo un equipo gigantesco que funcionó como reloj. Trabajé intensamente con muchas personas, que no quiero nombrar en detalle porque siempre me puedo saltar alguna por error”, relata.
Y recuerda una anécdota: “Nos falló un conjunto de la Universidad para cantar la “Misa criolla” de Ariel Ramírez, que tanto le gustaba al Papa. Yo casi me muero. Pero el recordado maestro Víctor Alarcón -destacado músico y académico fallecido en septiembre de ese mismo año- era un hombre de recursos infinitos, y llamó a un conjunto de la Universidad de la Frontera, quienes vinieron felices a cantarle al Papa”.
Y añade: “Yo ya tenía a mi haber el diseño y producción de eventos de gran magnitud, pero encargarme de la histórica visita del Papa Francisco a la UC, se convirtió en uno de los más grandes hitos de mi vida profesional”.
Momento de inflexión y un vuelco hacia la comunidad

“Para el estallido social -que comenzó el 18 de octubre de 2019- yo estaba levantando un espectáculo, el Atrio de Santiago, con 2000 voces que cantarían al día siguiente en la Plaza La Paz”, relata. Luego la situación obligó a restringir algunas actividades, lo que impactó la labor de la Dirección de Artes y Cultura. Sin embargo, el momento más crítico vino unos meses después: la pandemia por Covid. ¿Cómo impregnar de arte los patios y las aulas, si toda la comunidad universitaria -y todas las personas- estaba en cuarentena?
Entonces nació “Artifica tu casa”, un festival online que reunió a numerosos profesores de la UC e invitados para dar charlas y/o conversar sobre sus disciplinas artísticas. Tuvo tres líneas: Artífica tu casa con las universidades chilenas, chilenos del mundo y los grandes artistas. Más de 6 mil personas asistieron de manera remota, durante cada uno de los tres años en que se realizó el programa.
Otro proyecto icono es el coro ciudadano Barrio San Borja. Todo nació con una pregunta a la presidenta de la junta de vecinos, Carmen León: “¿Qué le gustaría escuchar para Navidad en las plazas del barrio?”. La respuesta no se hizo esperar: “¡Villancicos!”. “¿Y qué le parece si armamos un coro con los vecinos del barrio?”, fue la contrapropuesta de la DAC. Así fue como en el año 2021, un grupo de personas que jamás habían interpretado una partitura, se reunieron bajo la dirección del entonces joven estudiante de Dirección Coral en el Instituto de Música UC, Matías Luna. Hoy forman parte de la escena coral de Santiago.
En ese sentido, “Artifica tu barrio”, ha sido un decidido esfuerzo por volcar la actividad cultural fuera de los campus universitarios: a las plazas y escuelas. Entre 2023 y 2024, en colaboración con la Facultad de Artes -con sus tres unidades académicas: Artes, Música y Teatro-, los estudiantes llegaron hasta sectores menos privilegiados de Santiago, para montar espectáculos que tuvieron una gran acogida por parte de las comunidades.
En esta misma línea nació “La flauta mágica en la escuela”, que desde 2022 ha buscado enriquecer la práctica educativa en los colegios y escuelas básicas. La metodología fomenta la exploración y habilidades transversales por medio de actividades interdisciplinares, teniendo como eje la obra “La flauta mágica” de Wolfgang Amadeus Mozart para integrar contenidos curriculares y desarrollar aprendizajes interdisciplinarios, que abarcan las asignaturas impartidas desde primero a octavo básico. Hasta 2025 la experiencia se habrá realizado en 20 escuelas de las comunas de Pirque, Independencia, La Pintana, La Cisterna, Ñuñoa, San Ramón, Cerrillos, Puente Alto, San Joaquín, Santiago y Maipú. El trabajo culminó con la puesta en escena de la obra, en la que participaron los niños junto a cantantes líricos e instrumentistas profesionales. La iniciativa fue tan exitosa que recibió el Premio a la Ópera 2024, otorgado por el Círculo de Críticos de Arte de Chile.

Legado y mirada a futuro
Toda esta labor fue recogida en la publicación “15 años de las artes en la UC”, editada recientemente y que busca visibilizar buena parte de todo este esfuerzo.
- ¿Las artes, se ven en la universidad ahora?
Creo que estos quince años sirvieron para impregnar la vida institucional, la vida universitaria, de las artes. Para hacer que las artes tengan presencia en la vida cotidiana, que se sientan, que el ambiente universitario conviva con el pensamiento artístico, así como convive con el pensamiento investigativo”.
Otros aspecto que destaca Miryam Singer, es que los académicos se sientan apoyados. “Que los académicos tengan la libertad para crear y escuchar sus propias voces creativas, tanto en lo que significa la creación de obra como de investigación pura, publicable. Yo creo que los académicos sienten que hay una universidad preocupada por proveer las mejores condiciones posibles para su pleno desarrollo profesional”, afirma.
- ¿Cómo te gustaría ver las artes y la cultura en la universidad de aquí al 2050?
“Me gustaría que los artistas se convirtieran en creadores de grandes proyectos, que pudieran generar proyectos de gran envergadura con relevancia nacional. Creo que el rector De la Llera será un tremendo aliado de las artes para pensar en grande. ¡Tengo extraordinarias experiencias al respecto! Cuando armé el curso “La Experiencia de las Artes” fui a pedirle fondos para llevar a los alumnos a tener la experiencia viva de las artes: entradas para un concierto de música sinfónica, para una ópera, para un ballet en el Teatro Municipal; un recorrido por 5 hitos de la Arquitectura en buses charter, etc. Sin titubear un segundo me dijo “aquí está lo que necesites”. Es cuestión de observar lo que hizo con el Complejo Luksic UC: no solo creó una infraestructura física, también la dotó de fondos para montar un Centro Cultural”.
Y entonces la artista plantea uno de sus sueños: “Me gustaría que hubiesen embajadores de la UC a lo largo de todo Chile, personas que se conecten con las escuelas, que hagan investigación vinculada a las artes. Me gustaría que las artes pudiesen encontrar entre sí muchos puntos de contacto, para quela UC se sintiera como una presencia unificadora, que la universidad contara con una oficina que expandiera la presencia de las artes en todo el país”.
Y remata: “Las artes tienen como fin último llegar a las personas. Están hechas para conectar comunidades, para conformar identidad: comunitaria, ciudadana, del país”.