Bachillerato Inicia: el programa pionero para estudiantes técnico profesionales llega a Villarrica

En junio de este año, se dio el vamos a una nueva puerta de entrada a la universidad: se abría la convocatoria para que estudiantes provenientes de establecimientos técnico profesionales y que quisieran seguir una carrera universitaria en la UC, pudieran postular para formar parte de la primera generación del programa Bachillerato Inicia. Para algunos, sólo se trataba de un nuevo programa académico más, pero para quienes sueñan con seguir una carrera profesional, era la oportunidad que estaban esperando. 

Este fue un hito que se suma a un exhaustivo trabajo que viene de mucho antes, con la gestación de este programa, trabajo colaborativo entre las distintas unidades de la Vicerrectoría Académica, liderados por Pablo Marshall, director de Bachillerato Inicia. “Este proceso de dar a conocer el programa ha sido muy intenso: hemos visitado establecimientos, concretando un vínculo con 120 de ellos, realizamos 17 charlas vocacionales, recibimos estudiantes en el Campus San Joaquín a través de 12 tours, entre otras instancias, la mayoría en la Región Metropolitana, y cinco en la Región de Valparaíso y O’Higgins. En verdad ha sido un trabajo importante, que hemos logrado desplegar con la participación activa de la Dirección de Admisión y del equipo Bachillerato Inicia”, explica el directivo. 

Un programa pionero

En total se recibieron 300 postulaciones y, entre los meses de septiembre y noviembre, los postulantes han participado del Programa Vocacional Inicia (PVI), instancia de carácter obligatorio, que forma parte de los requisitos para ingresar al programa en marzo 2024 y que, en la actualidad, cuenta con 204 jóvenes que siguen en el proceso. 

En el transcurso del PVI, los integrantes del equipo pudieron constatar que un número importante de jóvenes había seguido una carrera técnica porque fue la única alternativa que tenían. “Muchos de los postulantes indicaron en las entrevistas con sus monitores, que las razones por las que entraron a un TP o especialidad, no tienen mucho que ver con sus intereses personales, sino que era la única opción que tenían”, explica Rocío Albornoz, profesional de Bachillerato Inicia. “A mi parecer, lo más importante es que el PVI permite a los postulantes dos cosas, por una parte, obtener información sobre carreras, financiamiento, respecto de la universidad, etc., y por otra, les facilita un espacio de autoconocimiento, para saber qué les gusta, qué no, sus fortalezas, habilidades y barreras”, agrega.

“Ha sido una muy buena experiencia. Un grupo significativo de los estudiantes que postularon al programa está muy motivado, ha participado activamente en las distintas actividades del programa vocacional y actualmente se encuentran rindiendo las pruebas de selección en base a las habilidades intra personales e interpersonales”, comenta la profesional. Estas evaluaciones son parte también de los requisitos de selección y que, a diferencia de las otras vías de admisión, no exige puntaje mínimo en la prueba PAES para postular, sino que se evalúan las herramientas personales de cada postulante, la madurez con que ha enfrentado este proceso de discernimiento, junto con sus respectivas trayectorias previas y proyecciones futuras.

Nicolás Conejero es uno de los pooco más de doscientos postulantes de Bachillerato Inicia. Nació y estudió en Llanquihue, Región de Los Lagos, y con mucho esfuerzo y dedicación ha participado de cada instancia del PVI. “Mi motivación para haber llegado hasta aquí es para cumplir mi meta, que es entrar a la Universidad Católica, la más prestigiosa del país. Esta era una gran opción, una tremenda oportunidad, sobre todo para mí, que soy de región, para poder estudiar la carrera que quiero. Este es un gran y nuevo desafío para para mí”, afirma el joven.

“El programa vocacional ha sido súper entretenido y enriquecedor, y nos ha ayudado a poder guiarnos y formar mejor nuestro camino en el tema académico y en nuestra vida”, dice Martina Bravo, proveniente de Iquique, en la Región de Tarapacá.

Alexis Muñoz, en tanto, viene de la ciudad de Rahue, Región de Los Ríos, y valora mucho la posibilidad de realizar el Programa Vocacional Inicia: “Además de ser superentretenido, es muy motivante, nos inspira para seguir con nuestras metas y nos ayuda mucho a pensar en nuestro futuro”. Algo similar a lo que opina Tomás Henríquez, de la ciudad de Concepción, Región del Biobío: “Mi experiencia en el programa de Bachillerato Inicia ha sido muy buena, porque me ha ayudado a formar un plan de vida concreto, basado en la realidad. Ha sido muy útil para los jóvenes inexpertos que somos”.

¿Por qué llegar a Villarrica?

La UC tiene una larga historia de presencia en Villarrica. Hoy en día, la Región de la Araucanía y de Los Ríos cuenta con cerca de 100 establecimientos que imparten formación técnico profesional, con más de 7 mil egresados cada año. “Estos estudiantes viven en las regiones con mayores índices de pobreza del país y, en muchos casos, la opción de seguir una carrera técnica no fue realmente una opción, sino que era la única alternativa disponible. Estos estudiantes no tienen muchas oportunidades para proseguir estudios en la educación superior universitaria”, comenta Pablo Marshall.

Agrega que sólo en la Región de La Araucanía, los estudiantes TP que acceden a la educación superior llega al 38%, mientras que a nivel nacional este porcentaje alcanza un 44%. Con esa visión y en alianza con Duoc UC, institución que abrió recientemente una sede en la zona, el programa de Bachillerato Inicia ofrecerá a estudiantes de esta región y aledañas, la oportunidad de ingresar a la UC en el proceso de admisión 2025, en su Campus Villarrica, luego de pasar por un proceso de preparación, nivelación y discernimiento vocacional, tal y como ha ocurrido con el primer grupo en acceder al programa.  

Gonzalo Valdivieso, director del Campus Villarrica, valoró la llegada de este programa a la región y que, una vez que se ponga en marcha, “si algún estudiante quisiera articular posteriormente con las carreras de pedagogía, lo va a poder hacer con nosotros acá. Este programa nos permitirá diversificar nuestro cuerpo estudiantil y estamos convencidos que eso le hace muy bien también a nuestros actuales estudiantes de pregrado, del minor y quienes provienen del extranjero”.
 
“La presencia de Duoc UC en Villarrica, junto con el programa Bachillerato Inicia en el Campus, genera un polo de educación superior para estudiantes de establecimientos técnico profesionales. Para algunos, la mejor opción será un programa técnico o profesional en Duoc UC; para otros, el programa de Bachillerato y las carreras de la UC será la mejor opción. Se trata, justamente, de ampliar oportunidades”, puntualiza Pablo Marshall.

El próximo 9 de diciembre, Nicolás, Martina, Alexis y Tomás, junto con el resto de postulantes al programa, deberán rendir las últimas pruebas de este proceso de selección, desarrolladas en conjunto con MIDE UC. Ese mismo día culmina el PVI y los primeros días de enero 2024 se darán a conocer los resultados de este proceso y sabrán si formarán parte de la Comunidad UC. 

Próximos desafíos

El siguiente reto es continuar posicionando este programa en los establecimientos y estudiantes técnico profesionales, “lograr que perciban el valor que Bachillerato Inicia les puede entregar, y que se atrevan a postular y seguir el proceso con nosotros”, expresa Pablo Marshall.

Por otro lado, como continúa el director del programa, buscarán desarrollar un trabajo fluido con las distintas unidades académicas de la Universidad, no solo considerando que la gran mayoría de los cursos que ofrecerá Bachillerato Inicia son dictados por estas unidades académicas, sino que, además, los estudiantes del nuevo programa articularán sus estudios con las distintas carreras. “Es muy importante que las facultades crean en el proyecto y reciban al alumnado en la articulación de estudios. La experiencia de este trabajo entre las facultades y el programa ha sido excelente hasta ahora. Las distintas unidades académicas han mostrado una gran disposición para ofrecer los cursos necesarios y para recibir estudiantes de articulación”, agrega el directivo.

Por último, las metodologías educativas son un aspecto a trabajar. “Los estudiantes de establecimientos TP tienen fortalezas y debilidades, al igual que quienes provienen de la enseñanza científico-humanista . Queremos aprovechar las fortalezas, como el trabajo en equipo, el desarrollo de proyectos y el pensamiento aplicado, entre otros, para apoyar el proceso de aprendizaje. En cuanto a las debilidades, existen brechas significativas en la formación en ciencias, por lo que deberemos trabajarlas para prepararlos, de modo de hacer una progresión exitosa en las carreras de la Universidad. Para lograrlo, nos hemos comprometido con trabajar en innovaciones pedagógicas”, sentencia Pablo Marshall.